1- Enfóquese en las áreas críticas, donde haya problemas, y despreocúpese de los demás.
Los CEO exitosos aprenden rápidamente a determinar cuando un área de la empresa está en problemas. Entonces, con precisión de rayo laser, trabajan y aplican todos los recursos necesarios para definir el problema, y para encontrar y aplicar la solución rápidamente.
2- Contrate expertos para cada función, que también tengan potencial como futuros gerentes.
Cuidado con el orden de las palabras en este consejo. Se puede capacitar y guiar a los subalternos para alcanzar destrezas gerenciales, pero muy probablemente no se tenga el tiempo o sea impracticable darles capacitación y experiencia en lo técnico y funcional.
3- Los negocios son lo primero.
Negocios y clientes siempre, siempre, siempre son lo primero.
Esto no significa que esté bien dejar de controlar o permitir desmoronarse los procesos internos, pero hay que tener presente que la función principal de la empresa son los negocios, y eso significa clientes y ventas.
4- Piense hacia arriba.
Una función fundamental de cualquier gerente es proporcionar a su jefe lo que necesita para tener éxito, y esto de una manera que fomente una relación de compatibilidad y mutuamente beneficiosa. Y esto se aplica también a los compañeros. Si usted siente que su jefe y sus compañeros no están recibiendo lo que necesitan de usted, pregúnteles uno por uno cómo puede usted servirlos mejor.
5- Ayude a "gerenciar la empresa".
Esta es una actitud crítica que puede hacer la diferencia en su carrera.
Si usted tiene una mentalidad de nicho demasiado fuerte (ej.: mi grupo es lo que importa), usted no progresará. Pero si usted tiene siempre presente como prioridad ayudar a "gerenciar la empresa", entonces sus posibilidades aumentarán considerablemente. Esa actitud le dará una perspectiva más amplia que de hecho ayudará a la empresa, y será percibida positivamente por los compañeros y por sus superiores.
